Dos años de la Ley de Exclusión Sanitaria en España
El 1 de Septiembre de 2012, entró
en vigencia el RDL 16/2012, por el cual, entre otras medidas, se excluye a las
personas inmigrantes "sin papeles" de la atención sanitaria gratuita; salvo
embarazos, niños y urgencias.
A dos años de esta nefasta
medida, la que se justificaba por “la necesidad de recortes”, 800 mil extranjeros
han visto retiradas sus tarjetas sanitarias, se han documentado, según Médicos
del Mundo, más de mil casos de exclusión sanitaria, y al menos dos personas
han muerto por no haber ser sido atendidas.
Hoy en los hospitales y centros
de salud, se leen carteles como: “A
partir del 01/09/2012, es obligatorio (en negritas y subrayado) presentar la
Tarjeta Sanitaria para cualquier trámite o consulta”, esto evidentemente
disuade a las personas “sin papeles” de asistir a los servicios de salud,
agravándose sus dolencias y poniendo además en peligro la sanidad pública. Es
decir el tan anunciado ahorro público, no lo es, por el contrario, se está
abriendo una ventana a la saturación de los servicios de urgencias, y se
constata una mayor marginación de un colectivo que ha venido a España para
labrarse un futuro mejor y que aporta económicamente, vía los impuestos
indirectos, a las arcas estatales.
La vulneración de derechos
fundamentales como el derecho a la salud, ha traído también experiencias de desobediencia
civil como el colectivo Yo sí Sanidad Universal, que además de llamar a la
desobediencia al personal sanitario y a la población española, organiza grupos
de acompañamiento que ha permitido a las personas inmigrantes sin permisos de
trabajo y residencia, sentir que no están solas y que organizándose es posible
visibilizar estos actos de exclusión y marginación.
Pero la exclusión sanitaria del
RDL 16/2012 es sólo una parte de las medidas de recorte y privación de derechos
que los gobiernos del PP y PSOE han venido implementando para ¨luchar” contra
la crisis. Como con las privatizaciones, reforma laboral, educativa, etc. hay
grupos beneficiados (los de siempre) y grupos afectados (también los de
siempre). La reforma sanitaria es pues otro golpe más contra los pobres, pero
también un motivo más para la organización, lucha y construcción de propuestas
alternativas desde los pueblos.
Comentarios